El hombre, de 20 años y origen marroquí, está acusado de violar a una mujer hasta en tres ocasiones.
Su modus operandi era, entrar en la tienda donde se encontraba la mujer, la intimidaba con un arma blanca , se llevaba la recaudación y la agredía sexualmente. Así, lo hizo presuntamente hasta en tres ocasiones.
Después de cada violación, la mujer denunciaba los hechos ante la Guardia Civil. Tras la investigación el hombre fue identificado, localizado y detenido, pese a que siempre utilizaba capucha y mascarilla para cometer los delitos.


Además, se le incautó la ropa utilizada en las agresiones que había ocultado en un descampado.
Cabe esperar una condena por parte de la justicia y una vez cumplida, la expulsión inmediata del país. Los delitos en España aumentan conforme la llegada de más inmigrantes ante la pasividad del gobierno. Esperemos que no se le aisle y los presos comunes actúen como siempre han hecho con los delincuentes de este tipo de delitos.